Rajoy y Puigdemont se reunieron en secreto en Moncloa el 11 de enero

El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy se reunió con su homólogo catalán, Carles Puigdemont en Moncloa en un almuerzo secreto,que se celebró el pasado 11 de enero, según ha publicado este miércoles 'La Vanguardia'.

La reunión se saldó con un fracaso, según fuentes conocedoras de este contacto. Ambos líderes constataron que sus posturas estaban muy alejados y en el caso de Rajoy de que el presidente catalán no pensaba moverse en su convicción de convocar el referéndum sobre la independencia de Cataluña.

Esta misma mañana, el jefe del Ejecutivo ha reiterado que su objetivo es dialogar sobre los problemas que afectan a los ciudadanos, pero no sobre cómo inclumplir la ley. Ha sido el único argumento expuesto por Rajoy ante esa noticia en declaraciones a los periodistas en los pasillos del Congreso, sin querer confirmar explícitamente la existencia de esa reunión ni si en ella le explicó de forma detallada a Puigdemont de qué estaba dispuesto a hablar. "Quiero hablar, pero quiero hablar de los problemas reales y no de liquidar España", ha dicho.

El encuentro tuvo lugar al margen del vicepresidente Oriol Junqueras pero también del Gobierno de Mariano Rajoy. De hecho tanto la Generalitat, a través de su portavoz, Neus Munté, como miembros del Ejecutivo español lo estuvieron ayer desmintiendo de manera radical.

Rajoy fue más listo en su entrevista en Telecinco el pasado lunes. A la pregunta de si había reuniones secretas con la Generalitat replicó “si las hubiera, discretas o secretas no las iba a contar yo, porque entonces ya no serían discretas o secretas”. Lo único que el presidente del Gobierno sacó del encuentro fue asegurarse un contacto directo con Puigdemont, de presidente a presidente en caso de que la tensión política en Cataluña vaya a crecer en los próximos meses, lo que dado el panorama actual parece lo más probable.

Una bilateridad a la vasca

El presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont. (Efe)

El presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont. (Efe)

Rajoy fue el impulsor de la reunión, en un intento de que Puigdemont se sumase a la Conferencia de Presidentes autonómicos y de incorporar a Cataluña a la negociación del nuevo sistema de financiación. Puigdemont, según las fuentes consultadas, se negó, alegando que aspira a una bilateralidad a la vasca que en ese momento Rajoy no podía ofrecerle si bien, el presidente español, con su estilo gallego habitual, tampoco se negó de manera rotunda en un futuro en que la negociación hubiera pasado por más pasos. Puidemont ni siquiera aceptó acudir a la cumbre de presidentes autonómicos, con lo que Rajoy ni siquiera arrancó una foto de su encuentro extraoficial.

Los descubridores del encuentro fueron por un lado el delegado del Gobierno en Cataluña, Enric Millo; que apuntó que había contactos más profundos de lo que parecía en TV3 en una entrevista este fin de semana y el líder del PSC, Miquel Iceta, que apuntó a una cumbre secreta Puigdemont-Rajoy en Madrid durante un encuentro con la prensa en el Club Siglo XXI.

Con la reunión, Puigdemont reafirma que tiene agenda propia y debilita la imagen de Junqueras como hombre fuerte del gobierno catalán, en el clima preelectoral que viven ERC y el PDeCAT. En el caso de Rajoy resulta más complejo. Difícil saber si sube o baja la escalera.

Fuente: http://ow.ly/88jY309eZ30

Categoría: ACTUALIDAD Miércoles 22 de Febrero del 2017