Puede que ahora mismo te estés enterando de que los cosméticos caducan. Pues sí, tienen fecha de caducidad (como los yogures) y utilizarlos más allá de lo indicado puede ser un riesgo. Todas nosotras tenemos, por lo menos, alguna barra de labios que compramos en los 90, una cajita de polvos que ya son de todo menos compactos o una base de maquillaje líquida que usamos desde hace tres años, pero todavía seguimos utilizándolos. Nuestros bolsillos aún notan la crisis y si, después de todo, no huele mal y tiene buen aspecto, ¿por qué no usarlo?

Para empezar, te vas a encontrar con que sus propiedades de color y acabado no serán las mismas que cuando lo compraste. Prepárate para lucir grietas en tu maquillaje, como poco. Pero existen riesgos mayores a tener en cuenta, como la posibilidad de contraer una infección. ¿Recuerdas que en cada frasquito hay un dibujo de un bote con una tapa abierta? En ese dibujo, además, podrás ver un número junto a la letra M. Pues esa cifra indica los meses que puede usarse el producto de forma segura después de su apertura. Pasado ese tiempo, tanto el cosmético como el envase empiezan a perder sus propiedades. Es muy importante dejar de utilizar cualquier producto cuando su textura o aroma cambian, cuando ha sido expuesto a calor intenso (por ejemplo, si lo olvidamos en el coche). Pero, específicamente, cada producto puede desarrollar una problemática diferente. 

Máscara de pestañas

Es uno de los cosméticos con los que tienes que ser más escrupulosa, ya que se aplican en un área superdelicada: los ojos. Deberías desechar siempre el rímel cada tres o cuatro meses. Usar un rímel que lleve abierto más tiempo podría derivar en infecciones bacterianas o irritación, ya que el tubito (fórmula cremosa y entrada constante de aire) constituye un buen caldo del cultivo para los gérmenes. Si alguna vez has tenido conjuntivitis, no querrás poner en peligro tus ojos. 

Bases de maquillaje

Si la base líquida viene en frasco con tecnología 'airless', que permite que no entre aire en el frasco y en el que el producto puede salir a chorro sin tener que meter los dedos, será seguro durante más tiempo. Aún así, no deberías usarla más allá de su fecha de caducidad. Los ingredientes de una base podrían alterarse y aumentar el riesgo de desarrollar gérmenes debido a que los conservantes ya no son eficaces. Las irritaciones y las infecciones cutáneas son mucho más comunes de lo que parece. 

Barra de labios

Independientemente de cuándo caduque, deberías deshacerte de tu barra de labios preferido si has sufrido alguna infección bucal, para prevenir una nueva infección. Cuando un barra de labios expira pierde sus propiedades de manera notable, ganando dureza y deslizándose peor. En algunos casos puede desarrollar moho. 

Colorete y polvos

Los formatos en polvo suelen ser los que más aguantan y, por ello, los más seguros. Precisamente la ausencia de agua y aceites hace que puedan usarse durante uno o dos años sin problemas. Lo que les puede pasar es que se endurezcan y se apliquen peor, siendo más propensos a quebrarse. Siempre y cuando no contengan humectantes, puedes arriesgarte incluso a usarlos más allá de la fecha recomendada. Eso sí, vigila que no cambie la textura o el color.

'Eyeliner'

Ya sea líquido o cremoso pasa lo mismo que con el rímel. Aunque el delineador de ojos tiende a durar más tiempo antes de caducar, el riesgo de contaminación por gérmenes es alto si se usa más allá de la fecha recomendada. Mejor prevenir y desechar los delineadores viejos. 

Fuente: http://ow.ly/I2dt305B7Hl